Alicún se las ingenia para que la crisis económica no impida la creación de la "villa termal"

Aguas termales en Alicún

El ayuntamiento de Alicún tenía previsto ejecutar un proyecto, dentro de la tercera y cuarta anualidad, para restaurar y poner en valor los baños romanos y musulmanes del municipio, unas aguas calientes con las que Alicún espera ver reflotar su desarrollo turístico y, por ende, económico.

Sin embargo, la crisis financiera ha dejado ya demasiados proyectos en tantas localidades sin poder desarrollarse, y Alicún no es la excepción. O sí, porque según nos ha contado su alcalde, el popular Manuel Jesús Cantón, si bien su ayuntamiento no tiene dinero para poner el 30% que le corresponde de esta obra, no renuncia a la rehabilitación de los baños y "no se abandona el proyecto".

De hecho, actualmente se está arreglando la calle que da acceso a los baños termales y se ha repicado ya el lavadero (donde se espera levantar un centro de interpretación) y según cuenta el primer edil, cada euro que se ahorra el ayuntamiento en las distintas partidas se destina para paneles informativos y pequeñas actuaciones en los mencionados baños, de forma que, de seguir así y salvo que la crisis empeore aún más, en unos dos años se podrían abrir al público. 

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